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Jueves 27 de Enero de 2011
Omar Pérez Díaz/Sol de Hidalgo
Pachuca, Hidalgo.- No importa si es rival. Tampoco si ha pasado año y medio desde su partida. Enrique Meza es un hombre que inspira respeto y cariño entre los Tuzos. «Sí, porque para muchos fue como un maestro», se sincera Paúl Aguilar, uno de los tantos jóvenes que surgieron bajo la mano del experimentado técnico.
Este sábado vuelven a encontrarse. Pachuca y Cruz Azul juegan una nueva edición del Clásico Hidalguense, en la cuarta fecha del Torneo Clausura 2011.
Oportunidad de estrechar la mano y darle un abrazo al amigo, al confidente, al técnico…
Miguel Calero por delante: «El ‘Profe’ es mi amigo, lo quiero mucho, merece que le vaya bien en lo profesional y en lo personal; sabe que puede contar conmigo en las buenas y en las malas. En este equipo fue más importante lo que nos dejó como persona», señala el capitán.
Tres años duró la estadía de Meza en la Cuna del Futbol Mexicano. Dejó un legado de cinco títulos (cuatro internacionales y uno de Liga), además de jugadores.
Debutó a Paúl Aguilar, Luis Montes, Marco Iván Pérez, Víctor Mañón, Francisco «Gringo» Torres y Rodolfo Cota, entre otros, hombres que ahora son titulares con el Pachuca.
«Fueron muchas las enseñanzas que nos dejó dentro y fuera; se preocupaba de nosotros como jugadores y como personas; es el hombre que más me ha marcado dentro del futbol y lo quiero mucho», resalta Paúl Aguilar.
Una cálida bienvenida le espera a Enrique Meza fuera de la cancha, aunque ya adentro es otra cosa, como bien les enseñó a sus ex pupilos.
«Él estará en su lado y nosotros en el otro; hay que demostrar que deseamos ganar», avisa Paúl.
Y Calero, que tanto admira al «Ojitos» también remarca: «Somos amigos y compañeros de la puerta para afuera; en la cancha cada quien defiéndelo suyo».
Fuente: OEM
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