Francisco Lozada.- Tenía años que el Pachuca no hilvanaba una cadena de siete partidos sin ganar, y vaya que esto le ha pegado no sólo por los abucheos de sus seguidores, sino estadísticamente, al ubicarse en el último lugar de la clasificación general.
Para el vicepresidente deportivo, Andrés Fassi, dio por descartado que haya un ultimátum contra el técnico Diego Alonso y puede haber algo de verdad, porque el equipo ha estado en ventaja en tres o cuatro juegos, en que ha sido superado en los últimos minutos.
Es decir, parece que la disposición de los jugadores está a la orden, pero la falla está en el planteamiento táctico, de no saber aguantar los marcadores, con la posesión del balón, de no medir los tiempos y de arriesgar de más, abriendo los espacios que han favorecido a sus adversarios.
Esta es la falla del equipo y no hay que ser un especialista para hacer este análisis, porque el técnico ha combinado a la perfección la juventud de los canteranos y la experiencia de los refuerzos, para integrar un grupo dinámico, letal en el ataque, pero también plagado de errores en la defensiva.
Esto se remedia únicamente con trabajo y con un cambio lógico en su esquema, saber conservar los marcadores, porque el tiempo se viene encima, y por lo pronto es un hecho que esta vez no podrá asistir a la fiesta grande por los números sumados hasta ahora.
Sí, se ha hecho una pésima temporada que mantiene a los Tuzos con 7 unidades de 24 posibles, empatado en el último lugar con Chivas, Santos y Cruz Azul, por 18 de los punteros, Pumas y León; muy difícil de sumar los necesarios para estar entre los 8 invitados.
A LA BAJA EN LA PORCENTUAL
Lamentablemente, todo esto también ha repercutido en la porcentual, porque los Tuzos ya cayeron al lugar 13 y de momento no corren ningún riesgo, pero al paso que van, no queremos imaginarlo en el próximo torneo de clausura, causando lástimas y sufriendo por evitar el descenso.
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